- Nº de páginas: 257 págs.
- Encuadernación: Tapa blanda
- Editorial: Siete Islas
- Autor: Ismael Lozano Latorre
- Año de publicación: 2017
- Precio: 15,55€
Gracias a la editorial Siete Islas por el ejemplar.
Hoy os traigo la reseña de "Todavía no me he ido" de Ismael Lozano Latorre.
Ha sido el primer libro que he leído del autor, por lo que no sabía muy bien que esperar, y lo que quiero comenzar recalcando es que el autor me ha transmitido mucho, sobre todo si nos vamos hasta el nudo y desenlace de la historia...
Este libro nos enseña a vivir la vida de manera plena, porque hay cosas más importantes que las típicas preocupaciones superficiales que tenemos en el día a día.
Nos hace ver que todo acaba y que por ello tenemos el deber de preocuparnos por lo importante.
Por dejarnos querer, por dejar que nos cuiden y velen por nosotros.
Dejar que las personas que nos rodean estén en nuestra vida en las buenas, pero también dejarlas estar en ella en las malas.
Que hay que ser felices y amar hasta el último momento posible.
Empezamos la historia conociendo a nuestro primer protagonista, Aday, un chico sensible y tierno, que comienza su primer día como camarero en el bar de una Isla que es nueva y desconocida para él.
A este personaje dan ganas de achucharlo y cuidarlo a cada momento y nuestro otro protagonista, un gran mago llamado Joel que trabaja en el mismo bar que Aday, piensa exactamente lo mismo y enseguida tiene ese instinto protector hacia él. Necesita tenerlo cerca y cuidarlo. Sin embargo Joel no es delicado como Aday, sino todo lo contrario. Es orgulloso, cabezota y muy seguro de si mismo.
Estos dos personajes se conocen gracias a la magia de Joel, ya que siendo un gran ilusionista como es, pide que Joel sea su ayudante la noche que se conocen.
Aday siempre ha sido un gran aficionado de la magia y todo marcha sobre ruedas. Entre los dos protagonistas saltan chispas en aquel momento y comienza el acercamiento ente ambos.
Otro personaje importante y secundario es Amaranta, ayudante de espectáculo y amiga de Joel desde hace años.
El primer sentimiento que tuve hacia ella fue el rechazo. Una persona orgullosa y dura, que según vamos avanzando en la historia vamos descubriendo más a fondo y nos va enamorando.
Porque Amaranta guarda mucho en su interior y poco a poco vamos descubriendo los motivos de esta dura personalidad.
En el fondo es un gran apoyo para Joel, y una gran amiga que nunca le falta.
Cuando llevamos más o menos la mitad de la historia y parece que todo sale perfecto en la vida de estos protagonistas, hay un gran giro argumental que nos inquieta y engancha de una manera brutal.
A mi personalmente, este libro me ha conmovido de una manera tremenda y confieso que incluso he llegado a derramar alguna que otra lágrima.
Es un género LGTB que cala muy hondo y te hace valorar más la vida y las personas que tenemos cerca, a las que debemos cuidar y dejarlas que participen en nuestras vidas y experiencias.
MI VALORACIÓN
